viernes, 30 de mayo de 2008

En la sala de Espera

Mientras el reloj de arena corre incesantemente y cada grano es un fragmento de segundo menos, en tal ajetreo una de las mejores compañias inventadas por el hombre, resultan ser esos dispositivos con altas capacidades visuales y auditivas, que dan la facilidad de cargar todos tus discos en algún medio pequeño de unos cuantos gigas.
Estaba oyendo un remix bien implementado por UNKLE, de Garbage con la canción The World It´s not Enough, mucho más agresiva que la sinfonía de violines y violas que tiene la original.

Sería tan pero tan excitante tener un pequeño beso con alguna evil twin, no sé cosas un tanto egolatras quizás, por aquello de que no hay nada mejor que uno mismo.

Again and Again

Unos meses atrás conseguí a este dueto proveniente de Los Angeles, allí residen quienes dan forma y color a este proyecto pop denominado The Bird and The Bee, el tecladista y productor Greg Kurstin, y la cantante Inara George, hija de Lowell George.

Repleto de un hálito que te hacen chasquear los dedos, una composición de voces melódicas que me traen a la cabeza un vientecillo repleto de bossa. Las principales ascendencias sónicas de Inara provienen del pop barroco 60’s, el jazz, el sunshine pop, los girl groups spectorianos y la música francesa del mismo período, en especial Astrud Gilberto.

The bird and the Bee


jueves, 29 de mayo de 2008

Cables y verborrea

Bajo circunstancias donde cada décima de segundo el hombre como animal social, ha ido en detrimento de las maneras más viables que promueven la interrelación humana; lo cual ha traído como consecuencia un deseo exacerbado de consumo material lo que sustituye la sana comunicación entre dos seres humanos y por ende el conocimiento de alguien ajeno a ti.

La verborrea habitual ha comenzado a ser aniquilada y en vista de que los métodos comunes no funcionan, el hombre ha tenido la imperiosa necesidad de emigrar a infinidades de medios alternativos para sentir al menos un roce de dedos o simplemente un tono agradable del otro lado del pacífico, con una llamada telefónica.

Telefóno o no, como especies dotadas de voluntad y pensamiento, emigramos a lo que se nos haga familiar, donde no haya que dar tantas explicaciones sin tener a un interprete al lado, para que el mensaje llegue al otro de la manera más clara posible.

Camino al altar de las ideas y las convicciones espero vehemente que no sea otro ardid elaborado por las propias carencias o el anhelo de conseguir lo ideal. Algunas señales se encienden, y las murallas están activas por instantes por otros quedan completamente inactivas.
Seducción aleatoria de quien se ha encargado vehementemente de las llaves de los pasadizos ocultos, que tienen como final la corona de laureles.


Sigamos, prosigamos en el contoneo.






jueves, 8 de mayo de 2008

Alcances

Sorprendentemente esta noche decidí de nuevo escribir, debo admitirlo el estímulo me lo dio el hecho de tener contacto con alguien que significó demasiado en un tiempo, hasta decidí viajar hasta donde vivía él, para tener nuestro encuentro. En ese traslado conocí demasiado de la naturaleza humana además de personajes sacados de alguna residencia estudiantil sueca, en algún momento el avión y Noruega tuvieron más peso y resistencia que el temblor que nos unió una noche de navidad.

Realmente es increíble ver hacia atrás y balancear lo que fuiste alguna vez, y a dónde te diriges, es cierto muchas personas contribuyen a ello de alguna manera. Con acciones, cambios, sonrisas, odio y un sin fin de emociones que equivalen a crecer y mantener la constante.

Como es asiduo en mí todo tiene un track musical específico, en este preciso instante luego de buscar por todos lados una canción que me tenía prendada, la cual servía de toque perfecto para musicalizar el final de Garden State, pues sí al fin la conseguí. Da la coincidencia que también sirvió de tema para Jeux d'enfants una película que forma parte del Festival de Cine Francés, la cual tuve el placer de ver, y afirmé que por segunda vez alguna dupla director-guionista diseccionó lo que significa para mí el amor (la primera fue con Eternal Sunshine of the Spotless Mind).
De una forma que sólo pueden conjugar los franceses, se plantea la fórmula clásica de boy meets girl and he keep her, pero sea predecible o no, la constante que me encantó fue la cajita que ellos utilizaban como recordatorio de todo ese jugueteo galopante de la niñez hasta la formación posterior de la adultez.








Entre prefencias y visiones el amor siempre será el tema primordial que nos une a culturas, pensamientos y destruye cualquier barrera étnica e idiomática. Pero como todo lo bueno tiene un fin, puede ser un happy ending o un hate ending, sea cual fuera el final creo que las circunstancias en que se producen dependiendo del corte de tomas (cine) es lo que da ese caracter a la culminación.
Lo único que no me agrada de ello es cuando luego de la ruptura, se introducen los nuevos personajes que sustituyen a lo que dejó de ser el presente, y comienzan a emitir juicios o hacerse voceros de algo que no tuvieron que ver, o si acaso estar en una postura de narrador omnisciente que vive a través de las percepciones de quien cuenta la historia.

Pero una vez más, no importa que juzguen conforme a la realidad que apenas comienzan a conocer, yo sigo apostando por la variedad, la estabilidad y aquello que me sirva de inspiración, no necesito de una línea sin quiebres que de alguna manera terminará en el tedio que produce el aburrimiento de la falta de química.